¿Es gratis la salud en Cuba? Los médicos. (III)

medicos

La salud física y mental de muchos cubanos está bien jodida, dañada, desgastada, maltratada y, en la mayor parte de los casos, por culpa de vivir en un país donde la existencia es absolutamente estresante a causa de quienes gobiernan y sus políticas inoperantes, arcaicas, represivas y estúpidas.
De nada sirve la propaganda comunista exagerando sus logros en materia de salud pública si hay un solo cubano enfermo debido a males ocasionados por el agobio de la vida cotidiana, las carencias, la represión, la falta de libertades, las pésimas condiciones de vida, la existencia de una sociedad asfixiante y el hambre, el estómago pegado al espinazo porque le hemos dado el único pan a nuestro hijo que nos mira sin entender en qué mundo de mierda lo estamos obligando a vivir.
Un médico cubano me dijo una vez, me aseveró, que el cuerpo humano era exactamente igual a cualquier efecto electrodoméstico, que venimos al mundo con un tiempo de garantía, según él, de unos 40 años, pero que si nos cuidamos bien, nos alimentamos mejor y nos apartamos de los “horrores del mundo brutal” esta garantía podía extenderse mucho más en el tiempo. ¿Se imaginan Ustedes?
Pues bien las garantías en Cuba, todas, se las tragó el sistema comunista, las acaparó para sus dirigentes y familiares única y exclusivamente, el resto del pueblo, los más humildes, caducan por falta de una vida sana, de expectativas totalmente realizables y aspiraciones válidas que sólo pueden concebirlas en sus sueños.
En los primero años de la década de los 60s muchos médicos, enfermeras y personal de apoyo de la salud abandonaron Cuba porque sencillamente no querían hacer el juego a Fidel Castro y al tipo de modelo socio-económico que implantaría en nuestro país. Acción totalmente respetable porque los seres humanos son dueños de decidir dónde quieren vivir y trabajar. Los que quedaron, igualmente respetables, junto a algunos especialistas de la salud que vinieron de diferentes países socialistas, se vieron obligados a formar a nuevos galenos para cubrir la demanda asistencial que exigía el país.
Todo muy bien, bonito y necesario. Es innegable que graduaron muy buenos doctores en medicina y excelentes especialistas reconocidos a nivel mundial. Felicidades. Dudar de la capacidad intelectual del cubano es una falacia. Mis respetos para todos ellos con independencia de su filiación política, una cosa no tiene nada que ver con la otra.
Fidel Castro con su “altruismo” y su “solidaridad internacionalista” desmedidos y sostenidos únicamente por el pueblo cubano, descubrió que con la venta a otros países del servicio del personal de la salud podía obtener incalculables recursos económicos y, a partir de los años 90s el sistema de salud pública nuevamente se vio mermado por la “salida” de la mayor parte de su personal especializado, sólo que esta vez por conveniencia del gobierno castro-comunista (tanto que criticó a quienes lo hicieron a principios de los 60s).
Cuba es tierra de “Contingentes” y la salud no podía carecer de uno de ellos. La masividad en la enseñanza de la medicina, para paliar la crisis asistencial del país, auspició que muchos estudiaran medicina sin la consabida vocación necesaria, generando graduaciones mediocres porque, como es bien sabido por todos, “la masividad nunca produce genios”.
La mayoría de los médicos cubanos no quieren “cumplir misión”, esta es una realidad. Saben que son utilizados y explotados miserablemente, que sus familias quedan como rehenes del gobierno y que van a enfrentar los mayores peligros y las más terribles condiciones de vida en los países donde son destinados, pasa que también saben que esta es la única manera que tienen de obtener algún dinero para mejorar las condiciones de vida de sus hijos y familias o que si se niegan serán sancionados y “muy mal vistos” por el partido y sus dirigentes.
Los médicos cubanos en Cuba, en un alto por ciento, subsisten a base de “regalos” que les dan los pacientes.
No voy a entrar a analizar ahora (en este artículo) este y otros delicados temas, son dolorosos, inhumanos y tristes, solo diré que mientras estos hombres y mujeres sufren, carecen y añoran, el gobierno cubano se llena los bolsillos a manos llenas con el sacrificio de ellos.
Continuará…




Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Translate »