Una amiga muy querida me envía esta frase “celebre”, posterior a la Edad Media, posterior a la Revolución francesa y, sobre todo, posterior a 1959, que me ha dado pie para reflexionar hasta dónde es capaz de llegar el cinismo, el chantaje, la mentira, el odio y el “chacalismo” de quienes, en nombre del socialismo, defienden la abominación más repugnante a la que ha sido sometida todo un pueblo en toda la historia de la humanidad: El castrismo.
Pero el arma más importante y poderosa que tenemos para combatir al castrismo y a todos sus sumisos aun sin defenestrar es gritarles en sus caras de descara’os la verdad sobre qué significan esta pandilla de dictadores, sus rémoras culeras y el daño real que le han causado a Cuba y a todos los cubanos.
Mucho más peligroso, mortal, perjudicial y nocivo que Raúl Castro son quienes desde el temor y el oportunismo de izquierda sin enderezar lanzan sus diatribas pornochacumbeleras para sostener a un régimen que está irremediablemente acabado pero que persiste en patalear para no ahogarse en la mierda que él mismo ha creado.
La batalla contra esta lacra opresora, mafiosa, ladrona, mezquina y servil tiene que ser diaria, tiene que ser como gota de salidero que caiga persistentemente sobre estos fulanoides para que no los deje ni respirar y también para que esa buena parte del mundo, que todavía les cree el cuento de que son una revolución social, despierte de la larga siesta “fidelina” en que han sumido sus abofados cuerpos y entiendan, de una vez por todas, que estos tipos lo que son es una banda de asesinos y ladrones que tienen secuestrados los poderes en Cuba al más burdo estilo fascista dictatorial.
Unos por mentecatez, otros por miedo y muchos, pero muchísimos por oportunismo, lo cierto es que el castrismo aun tiene su bulto de subnormales que los reconoce y los “defiende” con “argumentos” que sólo ellos “creen”, pero que de tanto repetirlos se han convertido en el discurso más antiguo, dañino, aburrido, retrogrado, absurdo, hueco y estúpido que utilizan para justificar el descomunal desastre social, económico, político y humano que le han causado a la nación cubana y a otros pueblos también.
Las imágenes sobre la catástrofe del “socialismo cubano” no mienten, están ahí, dolorosamente visibles para demostrar que todo cuanto dijo y prometió Fidel Castro, el máximo responsable de esta desgracia, fueron puras patrañas de hombrecillo enfermo para engatusar a los cubanos y convertirlos en un enorme rebaño de obedientes “ceros”, anulados, y valga la redundancia, en su capacidad para disentir y señalar hasta los más evidentes disparates generados por una mente envuelta en la alquimia de convertir arengas y discursos en arroz con leche y una prosperidad que nunca vimos por alguna parte.
Así fue como “triunfó” esa revolución de pacotilla, repartiendo amenazas y sembrando el terror sobre unos y la muerte sobre todo aquel que se resistiera a ponerse el uniforme de miliciano “adelante, adelante, que termine la gran noche ya…” pues la frase sagrada de la Patria pasó a ser: “O estás conmigo o estás contra mi…”.
Son muchas las barbaridades e idioteces que utilizan los castristas para agredir a quienes no pensamos como ellos, o hemos decidido convertirnos en “látigos con puntillas en las puntas”, para azotarlos con verdades que están ahí, a la vista de todos, pero que se niegan a admitir porque después de hablar tanta porquería defendiendo a la dictadura les cuesta mucho trabajo meterse sus monumentales mentiras por el…
Las socorridas frases como que la revolución te dio educación gratuita, salud para todos, te dio dignidad, respeto, gratuidades para la vida y la muerte, un jabón al mes, medicinas, los pantalones te quedan pesca, obras sociales, deporte derecho del pueblo, chivo que rompe tambor…, consejos para la familia, azúcar prieta y marchas del pueblo combatiente, en la vida real, en la concreta, pregunto: ¿Qué coño significa toda esa mierda?
No, no y no, está bueno ya de mentir, la dictadura castrista no le ha dado nada a los cubanos, mucho menos gratis, la dictadura castrista lo único que ha hecho en estos 60 años es robarnos hasta el pedazo de aire que Dios nos dio para que pudiéramos respirar y estar “derechitos” aquí en la tierra.
Ricardo Santiago.
Dignidad????? Estaba en una competencia en Sudamérica hace par de años. En el lugar en que entrenaban tenían derecho a entrenar todas las delegaciones, llegaron un grupo grande de argentina y los dos cubanos salieron para darles el espacio. Cuando les pregunté porque salieron me respondieron…. Porque ellos llegaron. Les dije, noooo, entren, aquí todos tienen los mismos derechos!!!!!!
Ricardo Santiago, cuando vi esas manos marcadas por el trabajo me acordé de mi padre y de tantos que entregaron su hacer en aquel pais para que viniera un tirano a destruirlo desde San Antonio a Maisi…
Un amigo compuso una canción que recuerdo y entre otras cosas afirma «Pagarán por traición «… Todos los cubanos tenemos que sentirnos traicionados por el personero que nos impuso el diablo…
La denuncia contra esa lacra narcocomunista no resulta para nada difícil, porque la VERDAD nos asiste en toda su magnitud…
Esos discursillos a la ultranza castrista de los que optan por el dictador, sólo demuestran la capacidad tan grande de ignorancia que les devora.
Si nos fijamos usan coletillas, frases gastadas o recurren a hablar del pasado cuando desconocen la historia, y no tienen defensa ante la escabrosa, horripilante y desnuda realidad de la Isla.
De las falacias argumentadas por el Castro ni quieren recordarlas, ni las amenazas, ni de la venta de roboluciones, sólo están para defender las jabitas de pacotilla.
Arrastran sus vidas hacia el pantano del deshonor, y como sus amos Pagarán por Traición.