Las filias y las fobias de los Castro-comunistas.

Fidel Castro es un tipo que hizo y hace bullying a los cubanos. Hizo porque abusó y maltrató a todo un pueblo con sus imposiciones, aberraciones, caprichos, disparates e intimidaciones, y hace porque con su sola presencia o hasta con su fantasma lastima al pueblo de Cuba cada vez que aparece. La imagen de este hombre es asquerosamente repulsiva, y ellos lo saben, pero la siguen utilizando.
La verdad está documentada incluso hasta por ellos mismos. La usurpación del poder en Cuba la impuso a golpes de mentiras y engaños monstruosos: “no soy comunista, respetaremos la Constitución del 40, celebraremos elecciones democráticas”, etc., etc., etc. La mentira es una enfermedad terrible, pero cuando se utiliza para alcanzar poderes sobre los pueblos y subyugarlos, robarles, dominarlos y empobrecerlos se convierte en una aberración, una crueldad y un acto de barbarismo.
Los comunistas son abusadores por naturaleza, mentirosos ni se diga, oportunistas y de doble moral, como nadie en toda la faz de la tierra, aprovechados, maltratadores, genocidas, enredadores, sinvergüenzas y miedosos, son también algunos de los rasgos más definitorios de esta pléyade de facinerosos y peligrosos delincuentes sociales.
Fidel Castro, al frente de sus secuaces, arrastró al pueblo de Cuba a los más descabellados disparates, exigió eternos sacrificios y dedicación a su causa, obediencia y creencia en sus “nobles propósitos” y para colmo, aun hoy después de más de 57 años de miseria y explotación, sus mediocres continuadores le exigen a los cubanos: “hay que apretarse el cinturón”.
Definitivamente están enfermos. Terminaran culpándose de ese desastre los unos a los otros.
¿Cómo un hombre que acumula tantos fracasos en su gestión como ”gobernante” puede seguir existiendo?
Son innumerables las locuras y los planes fallidos de este tipo a lo largo de todos estos años, por sólo citar algunos: la revolución energética, los maestros emergentes, la batalla de ideas, las protestas por los cinco espías, el picadillo enriquecido, la pasta de oca, la masa cárnica, los planes lecheros, la acuicultura, las becas en el campo, el plátano micro-jet y su presencia, impuesta a golpes de terror, amenazas y escarnio a todos los cubanos.
Pero Fidel Castro, su familia y su pandilla, la de más alto nivel digo, también tienen miedo, mucho miedo, están aterrados ante la posibilidad de que el pueblo les diga basta y los arrastre por las calles como trapos inmundos, la estirpe de cada uno de ellos esta desperdigada por el mundo, incluso en los propios Estados Unidos, dueños de importantes compañías y recursos y han ido construyendo pequeños imperios (tal como hizo Hitler viendo su desastre inminente) con todo lo que han robado a la nación cubana y se encuentran hoy preparando un camino de escape para los que aun hoy quedan en la isla y la posibilidad de hacer resurgir el “fidelismo” como un “movimiento político social” cuando el Castro-comunismo en Cuba sea borrado de la faz de la tierra.
Para terminar quiero dejar bien claro que la “Revolución Cubana” que inventó Fidel Castro en Enero de 1959, y que nos impuso a los cubanos por más de medio siglo, como algo válido y hermoso, nunca fue Revolución y mucho menos Cubana, por lo que a partir de ahora le llamaré por el nombre que a mi juicio merece: Castro-comunismo.