Más allá de los horrores del castrismo, también nos destruyen el oportunismo y la ignorancia.
Yo digo, y lo reafirmo, que hay que ser muy ignorante, muy oportunista o muy imbécil, para defender a un régimen que, a todas luces, a simple vista, a veo, veo, qué ves…, y en la cara de todos los seres cubanos, y del mundo entero, ha destruido un país, su historia, su gente, sus … Leer más