En Cuba el hambre, la indigencia y la miseria castristas, son más espirituales que físicas.
Todos los días agradezco a Dios, y a mi madre, que no me dotaran con “atributos políticos”, ni que me dieran la “gracia” de los buenos periodistas, ni que me hicieran “analista” de la actualidad nacional e internacional, ni que me proveyeran del don de hablar en “videos-lives”, ni siquiera que me convirtieran en un … Leer más